La Carta de Derechos Digitales de Florida (FDBR), también conocida como SB 262, se ha convertido en una legislación importante para las empresas que hacen negocios dentro de las fronteras de Florida.
Marcando el comienzo de una nueva era de estándares de privacidad digital, y con la importancia de proteger los datos personales de los consumidores siendo más apremiante que nunca, el esfuerzo de Florida en este territorio es oportuno y crucial.
La creciente tendencia de la legislación de privacidad de datos en los EE. UU.
El FDBR de Florida no es un esfuerzo aislado. Entre marzo y junio de 2023, estados como Iowa, Indiana, Tennessee, Montana, Florida y Texas dieron pasos audaces al aprobar sus leyes individuales de privacidad de datos. Florida es el décimo estado en adoptar una ley de este tipo y el quinto de seis en hacerlo en 2023, lo que indica una ola de cambios en la perspectiva nacional sobre la privacidad de los datos.
Sin embargo, a diferencia de las leyes estatales establecidas anteriormente, el FDBR de Florida introduce elementos únicos que se centran principalmente en la protección infantil, las redes sociales y los ámbitos en evolución de la tecnología. En particular, la ley parece poner a los gigantes tecnológicos en su punto de mira, lo que refleja una preocupación más amplia sobre su influencia y prácticas de datos.
Explorando la Declaración de Derechos Digitales de Florida
Objeto y ámbito de aplicación
El FDBR salvaguarda los derechos digitales de más de 21 millones de floridanos. Exige responsabilidades específicas para las empresas que operan en Florida, particularmente aquellas que manejan la información personal de los residentes del estado. La legislación pone un mayor escrutinio sobre las grandes corporaciones tecnológicas, las nuevas tecnologías de consumo y el ámbito generalizado de las redes sociales.
¿Quién es un "consumidor" en Florida?
La definición de Florida se alinea con la mayoría de los estados, identificando a un consumidor como cualquier residente o persona dentro del estado que actúa fuera de un contexto comercial o laboral.
El modelo de exclusión voluntaria
Al igual que otras regulaciones de privacidad estadounidenses, FDBR adopta un modelo de exclusión voluntaria. A diferencia de los modelos opt-in, que requieren el consentimiento inicial de los usuarios antes de recopilar o procesar datos, el enfoque de opt-out obliga a las empresas a informar a los consumidores de sus prácticas de datos y les permite rechazar la participación.
Específicamente, las organizaciones deben divulgar:
- La naturaleza de los datos recopilados
- Los propósitos detrás de la colección
- Afiliaciones de terceros
- Métodos para que los consumidores opten por no participar, particularmente de ventas de datos, publicidad dirigida o elaboración de perfiles.
Además, las empresas deben obtener el consentimiento inicial para categorías de datos específicas (en particular, datos sensibles o información relacionada con menores).
Una distinción sorprendente en la ley de Florida radica en su definición ampliada de "niño". A diferencia de la mayoría de los estados que establecen el umbral de edad en 13 años, Florida amplifica su protección para incluir a personas menores de 18 años.
Diseccionando definiciones en el FDBR
Información personal vs. datos personales
La ley proporciona definiciones distintas para estos términos. En particular, los «datos personales» abarcan información vinculada a un niño, incluidos identificadores únicos como datos biométricos.
Además, la ley ofrece una definición más compleja de datos personales que la mayoría de las leyes de privacidad de los Estados Unidos, ya que enfatiza la importancia de los datos seudónimos, particularmente cuando se combinan con otra información para identificar a un individuo.
Extensión y expansión de la Ley de Protección de la Información de Florida (FIPA)
Desde 2014, Florida ha tenido la FIPA que cubre datos como números de Seguro Social, detalles financieros e información de contacto. FDBR amplía esta definición, reflejando el panorama tecnológico en evolución al incluir datos como información biométrica y de geolocalización.
Consentimiento en el mundo digital de Florida
Siguiendo los pasos del GDPR de la UE, Florida proporciona una definición rigurosa de consentimiento, enfatizando que debe ser «libre, específico, informado e inequívoco».
Además, el FDBR se alinea con otras leyes estatales como la Ley de Privacidad de Datos del Consumidor de Montana, asegurando que el consentimiento no se adquiera subrepticiamente a través de diseños engañosos o «patrones oscuros».
Cuando se trata de datos
El FDBR proporciona una clasificación completa de los tipos de datos, que van desde datos confidenciales hasta controladores y procesadores de datos. Significativamente, la definición de «controlador» en la ley de Florida es más exhaustiva que la mayoría: incorpora numerosos requisitos, siendo los umbrales de cumplimiento un aspecto prominente.
Alcance de la FDBR
¿Quién debe cumplir?
La ley es particularmente estricta para las empresas que operan dentro de Florida o que se dirigen a sus residentes.
Exclusivo de Florida, las empresas deben cumplir con un umbral de ingresos de más de US $ 1 mil millones, drásticamente más alto que otros estados como California, que se sitúa en US $ 25 millones. Este alto umbral implica que Florida se está enfocando principalmente en los gigantes tecnológicos, ya que una mera fracción de las empresas que operan actualmente en Florida excede este marcador de ingresos, lo que reduce la red de cumplimiento.
Además, los criterios específicos parecen apuntar a gigantes tecnológicos conocidos por las ventas de anuncios en línea, altavoces inteligentes y tiendas de aplicaciones, como Apple y Google.
Exenciones y exclusiones
Al igual que otras leyes de privacidad de datos, el FDBR de Florida respeta las leyes federales como HIPAA, COPPA y la Ley de Informes de Crédito Justos. Se proporcionan varias exenciones, incluidos datos de recursos humanos, registros de salud, datos de investigación y datos bajo el ámbito federal.
Entidades como agencias estatales, instituciones financieras, compañías de seguros, instituciones de educación postsecundaria y organizaciones sin fines de lucro también disfrutan del estado de exención.
Conclusión
La Declaración de Derechos Digitales de Florida marca un salto significativo en los esfuerzos continuos para proteger los datos de los consumidores. Si bien su enfoque en las grandes entidades tecnológicas y la protección infantil lo distingue, encarna el movimiento más amplio para establecer marcos sólidos de privacidad digital en todo Estados Unidos.
A medida que se acerca la fecha de vigencia del 1 de julio de 2024, las organizaciones deben prepararse para alinearse con las estipulaciones de FDBR y garantizar que los derechos digitales de los floridanos se defiendan adecuadamente.